ROMÁN CIFUENTES: EL ADIÓS DEFINITIVO
LISTOS. En Acción Nacional y en el círculo cercano al gobernador, se avecinan algunos ajustes en la antesala de la toma de protesta de la nueva legislatura federal.
UNA MÁS. Tras la asignación que hizo el Instituto Nacional de Elecciones de las curules de representación popular de las fuerzas políticas con registro en el país, se confirmó que el PAN Guanajuato tendrá una diputación plurinominal adicional a la del dirigente estatal Román Cifuentes Negrete en la próxima legislatura que arranca el próximo primero de septiembre.
APENITAS. El INE determinó que el PAN tendrá 13 espacios en la segunda circunscripción en la que se ubica Guanajuato. La secretaria ejecutiva del gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, Diana Gutiérrez Valtierra justo ocupa la posición 13 por lo que rendirá protesta en los próximos días y dejará vacante su cargo.
PERFIL. Gutiérrez Valtiera es originaria de San Francisco del Rincón. Fue funcionaria de la Dirección de Economía en el Municipio de León y a partir de 2013 ha ocupado cargos en la secretaría de Gobierno, en la coordinación general de Comunicación Social y en la secretaría particular del gobernador. Desde la toma de posesión del gobernador es la secretaria ejecutiva de Diego Sinhue.
OTRA VEZ. Diana Gutiérrez se agrega a Román Cifuentes Negrete, dirigente estatal del PAN en el estado que ya había amarrado la plurinominal federal. De acuerdo a los estatutos panistas, su cargo será ocupado por el secretario general Eduardo López Mares quien quedaría solo unos meses pues en noviembre está programado el relevo de la dirigencia estatal.
CAMBIO. Para relevar a Diana Gutiérrez se habla de Araceli Reyes Márquez quien actualmente es la secretaria ejecutiva del secretario de Infraestructura y Movilidad, Tarcisio Rodríguez.
VIL DEDAZO. Respecto a la dirigencia estatal blanquiazul, no faltarán algunos que levanten la mano pero la línea que tiraron en el panismo guanajuatense es que ni se emocionen porque las cúpulas se van a sentar a acordar quien es la mejor carta.
ALEJANDRA GUTIÉRREZ: EL GLAOMOUR DE LA LLEGADA
TAPAR EL OJO AL MACHO. Con eso de que Alejandra Gutiérrez Campos está muy ocupada en los foros ciudadanos para recoger propuestas para armar su plan de gobierno aunque este ya se encuentre amarrado, los integrantes del próximo cabildo azul siguen a la espera de que sean llamados por la próxima presidenta municipal que ni pío les ha dicho desde que recibió su constancia de mayoría.
PAN COMIDO. La alcaldesa electa casi coloca un letrero de “no molestar” porque solo está para su círculo cero y para nadie más. Porque en efecto, la alcaldesa será ella. En su momento tendrá que trabajar con su cabildo azul en el que no debe tener problema con los que tienen credencial azul que serán disciplinados y pueden aguantar lo que disponga Gutiérrez Campos.
¿PIEDRAS EN EL ZAPATO? Pero no hay que olvidar que hay personajes sin credencial azul como los exrepresentantes empresariales Luz Graciela Rodríguez y Arturo Sánchez Castellanos que no deben lealtad al panismo o se supone, no les va la vida política en su chamba de regidores.
SOBRE AVISO. En la mesa de su partido tendrá interlocutores que ya han demostrado en otros terrenos que no están para aplaudir todo lo que les manden y una clase empresarial exigente que una vez terminada la luna de miel, va por lo suyo.
LA DEL ESTRIBO…
Y mientras, en la definición del Congreso local, el dirigente estatal de Movimiento Ciudadano Rodrigo González no apaga todavía la veladora de la ilusión de ser diputado en la siguiente legislatura federal.
La espera se alarga porque el Tribunal Estatal Electoral aún no resuelve el recurso que interpuso su partido que cree que tiene derecho a una segunda curul plurinominal.
Se espera que la siguiente semana ya se dé el fallo aunque pase lo que pase, cree que se agotarán las siguientes instancias en Sala Monterrey y Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Si MC rompe los pronósticos de tirios y troyanos de que no habrá cambios en la legislatura en fallos de tribunales, el damnificado sería Morena.
Recordar es volver a grillar
SHEFFIELD Y LA APUESTA 2024: CUANDO TODO ERA ILUSIÓN
En ese momento, ni después el procurador Federal del Consumidor Ricardo Sheffield Padilla se trazó el objetivo de ser candidato a alcalde. Solo quería ser el padrino del susodicho y puso manos a la obra con una reunión a la que convocó a políticos de diversa extracción.
El abogado Jorge Marcelino Trejo, al exsíndico del Verde Eugenio Martínez Vega, al extitular del IACIP Mario Morales y al expriista Adolfo Pons estuvieron ahí. Sergio Contreras, dirigente estatal del Verde también fue invitado pero desde aquél momento declinó cualquier acercamiento con Sheffield y con Morena.
La apuesta de Sheffield era encabezar el liderazgo con una baraja de personajes que pudieran mostrarse, hacer talacha y ser las cartas de Morena para el 2021 y él, por su parte, consolidar un trabajo político, de cara al 2024, con la candidatura a gobernador en la mira.
Desde el arranque quedó claro que Marcelino Trejo traía muchas ganas y dinero para ser el elegido.
Algunos no llegaron ni al primer tercio de la carrera. Otros, como el exverde Eugenio Martínez, desde el principio se descartaron pero con gusto militan en el antipanismo. Sheffield y Eugenio olvidaron incluso algunos agravios y diferencias del pasado cuando se enfrentaron en las urnas en 2009.
Durante más de un año, Sheffield con Marcelino Trejo hicieron trabajo de tierra y también con sectores de la sociedad civil. Nadie los molestó hasta que llegaron los tiempos institucionales de Morena que es todo un caos como partido pero que tampoco es la franquicia que cualquiera agarra y se monta en ella.
Cuando Morena como instituto político apretó, el movimiento de Sheffield comenzó a desinflarse. Le mandaron algunos precandidatos nomás para estorbar y hacer mosca, tensaron la cuerda y al final lo mandaron a él como candidato.
La apuesta perfecta no para él ni para sus aliados sino para sus detractores. Él no lo tenía en mente y los resultados lo dejan mal herido políticamente. No noqueado ni aniquilado porque Sheffield ha demostrado ser terco y tenaz aunque hoy, de cara al 2024, parece haber sembrado demasiadas discordias, sobre todo, dentro del morenismo.
La imagen del día
EL ZAPOTILLO: DE LAS PALABRAS A LOS HECHOS
Los pobladores de Temacapulín lo dejaron claro en la reunión que tuvieron el sábado pasado con el director de Conagua, Germán Martínez Santoyo: quieren que las decisiones que asuma el gobierno de Andrés Manuel López Obrador les garanticen no solo que esta administración no inundará las comunidades que habitan sino que no lo haga tampoco quien asuma el poder el siguiente sexenio a partir del primero de diciembre de 2024. Eso va a estar más difícil.
Algo que está en sintonía con lo que hemos comentado esta semana en este espacio. El propio gobernador Diego Sinhue dijo en una de las entrevistas banqueteras de la semana que esperaba visión y voluntad de la Federación para que El Zapotillo siga siendo viable este sexenio pero en su defecto, esperaría al siguiente presidente o presidenta.
Y en esto han hecho énfasis los pobladores de Temacapulín, Acasico y Palmarejo. Así como Guanajuato ve que la falta de voluntad hacia El Zapotillo pudo haber muerto para esta administración federal pero podría revivir con el siguiente inquilino o inquilina en Palacio Nacional, los potencialmente afectados lo ven exactamente al revés.
Ya sabemos que una cosa es el rimbombante anuncio de un gobernante sobre una medida estratégica o un tema polémico (como el de López Obrador el pasado fin de semana) y otra, que se ejecute y se lleve a cabo.
Al día 15 de septiembre, el presidente se comprometió a regresar a Temacapulín para amarrar los compromisos asumidos y eso pasa por cambiar el decreto federal que da derecho a León de 24% de las aguas de Río Verde. El gobierno federal asumirá un plan de acción y los pobladores analizarán y decidirán, según lo prometido.
En el ínter, tendrá que darse el acercamiento con autoridades de Guanajuato. Este lunes, el director de Conagua se reunirá con el gobernador Diego Sinhue Rodríguez; con el alcalde Héctor López; con los representantes de Sapal y ya veremos si ya hay alternativas para León o más atole con el dedo.
Es evidente que con una presa ya construida, es prácticamente imposible que el gobierno de López Obrador pueda garantizar que no se mueva nada en el siguiente sexenio en el que ya no estará gobernando él y las decisiones las tomarán otros. Su compromiso con Temacapulín, Acasico y Palmarejo tiene fecha de caducidad: 30 de noviembre de 2024.
Así que no se ha dicho ni escrito la última palabra en este tema. Tan complicado como hacer que un gobernante aterrice en los hechos su discurso.