Familiares piden justicia para Juan Carlos
Luz Zárate
Celaya.- “¡Queremos justicia, queremos justicia, queremos justicia para Juan Carlos!”, fue el grito que reiteradamente hicieron durante el cortejo fúnebre, los hijos, familiares y amigos de Juan Carlos Padilla Aranda, el vendedor de tamales que fue golpeado por agentes ministeriales y que posteriormente falleció.
Fátima y Juan Carlos, hijos del comerciante que murió a la edad de 54 años, pidieron que “no se ensucie el nombre de su padre”, que se investigue a fondo lo sucedido y se haga justicia.
“Es muy doloroso lo que estamos pasando, no hay reparación para este dolor, lo único que queremos es que el nombre de mi padre esté limpio, solamente queremos justicia”, dijo Fátima Padilla.
Visiblemente dolidos, este jueves familiares de Juan Carlos lo despidieron como a él le hubiera gustado: cantando y al ritmo del mariachi, quienes acompañaron caminando al cortejo fúnebre desde una funeraria ubicada al poniente de la ciudad hasta el Templo de la Resurrección donde se realizó la misa de cuerpo presente y al salir nuevamente partió la caravana rumbo al panteón sur donde le dieron el último adiós.
“Amor eterno” fue la primera canción interpretada, seguida de otras como “Adiós ángel mío” o “Que se me acabe la vida”, fueron las melodías con las que arrancó la caravana rumbo al templo donde ya lo esperaban familiares, amigos y conocidos.
Fue al salir de misa, en el atrio del Templo de la Resurrección -barrio en el que creció Juan Carlos- cuando todos los presentes lanzaron una porra acompañado de un aplauso y al final nuevamente arrancaron caminando rumbo al panteón Sur acompañados del mariachi y de una patrulla de policía municipal.
Fue durante este último trayecto que hicieron caminando rumbo al Panteón Sur, que algunos familiares y amigos comenzaron a gritar entre llanto e impotencia que exigen justicia para Juan Carlos.
El momento fue emotivo, todos lloraban al tiempo que exclamaban frases pidiendo justicia para Juan Carlos.
Previo a este último adiós, Fátima y Juan Carlos Padilla, hijos del hoy occiso, dijeron que todo el proceso ha sido doloroso, desde el momento que ocurrió la detención, hasta el instante que encuentran a su familiar en el Hospital General de Celaya y les confirman que su papá estaba golpeado y ya había fallecido, así como el reconocimiento del cuerpo el cual contaba con golpes en varias partes del cuerpo y para rematar los dichos de la Fiscalía General del Estado acerca de la causa de muerte de su padre y la afirmación de que el finado contaba con una orden de aprehensión por un delito grave.
Señalaron que lo único que quieren es que se aclare la situación acerca de su padre, que se haga justicia y no se ensucie el nombre de su progenitor.
“¡Lo único que queremos es que se haga justicia y que no se manche la memoria de mi padre!”, afirmó el hijo de Juan Carlos.
Fue en el estacionamiento del Panteón Sur en donde unas 40 personas se despidieron de Juan Carlos, pues no se permitió la entrada a todos los asistentes debido a la contingencia sanitaria.
AC