Haciendas de Guanajuato, un patrimonio cultural en riesgo por falta de atención
Haciendas en Guanajuato. Foto: Especial
Guanajuato, Guanajuato.- Desde la llegada de los españoles se construyeron las primeras haciendas en lo que hoy es la zona Laja-Bajío, principalmente en los territorios que hoy comprenden Apaseo el Grande, Apaseo el Alto y Celaya. En estas se cultivaban granos, pero incluso había viñedos y gusanos de seda; hoy apenas quedan restos palpables de esos lugares.
Esto lo compartió Fernando Amate, cronista del municipio, quien señaló que en esta zona, desde Querétaro hasta Celaya, los españoles desplazaron a los nativos y se repartieron las tierras para instalar unas 200 haciendas, unas 20 de ellas en lo que hoy es el territorio de Celaya. Estas consistían en la casa del hacendado y los inmensos terrenos repartidos para la producción.
Algunas de las haciendas aún se pueden ver en San Juan de la Vega, San Miguel Octopan, San Elías, o en lo que hoy es el Tec de Roque. Ya en la zona urbana, existió la hacienda Veleros justo donde se construye la nueva Catedral; la de San Nicolás, donde se construye una tienda de autoservicio; la hacienda Requena en pleno jardín principal, que acaba de ser remodelada; y la hacienda de San Juanico, donde apenas queda su casco principal pues alrededor se construyeron viviendas, y otras que prácticamente ya no existen o están en deterioro.
Sin embargo, Fernando Amate explicó que, aunque arquitectónica, cultural e históricamente son valiosas y la gran mayoría están catalogadas por el INAH, también representan opresión, ya que en aquellos tiempos los hacendados eran dueños no solo de las tierras, sino de la vida de los peones, quienes hasta para casarse tenían que pedir permiso al patrón.
“Su valor es arquitectónico, histórico, económico y sociológico. Prácticamente no hay nada que perder. Es propiedad privada, entonces el municipio no tiene dinero para obras superfluas; el presupuesto municipal solo alcanza para los servicios básicos. Pensar en expropiar vestigios con fines de utilidad pública me parece un gasto inútil”.
Recordemos que en aquellos tiempos el sistema económico se basó en el sistema de haciendas, el cual tuvo algunos cambios con la Independencia, pero se terminó con la Revolución Mexicana, ya que los revolucionarios despojaron a los ricos de estos inmuebles o al menos de los terrenos para repartir entre el pueblo y fundar poblaciones.
Más noticias de Guanajuato
Un Maestro de Corazón: así ha sido la trayectoria del Profesor Ismael en Guanajuato
Gracias a beca, jóvenes exponen obras en Museo de Arte de Guanajuato
Anuncian nuevos pozos para Guanajuato capital, ¿dónde se encuentran?
