Teuchitlán: del dolor a una nueva esperanza para buscadoras en Guanajuato
Guanajuato, Gto.- El que Jalisco y Guanajuato estén ‘hermanados’ por el terror de las desapariciones no es nuevo. Incluso la zona tiene un nombre: “el corredor de la muerte” o “el triángulo de las desapariciones” y por años se han tenido documentados casos de personas desaparecidas en la zona. Se sabía, pero no se tenía la certeza como ahora con el campo de exterminio en Teuchitlán, Jalisco; punto, que plantea una nueva luz de esperanza para casos sin respuesta desde hace, como mínimo, 5 años.
Entre 2020 y 2025, la desaparición de personas a manos del crimen organizado entre las carreteras y límites de Guanajuato con Jalisco pasó de ser una sospecha o un “secreto a voces”, a ser incluso parte de una línea de investigación que derivara en más operativos. Tal ejemplo llega en octubre del 2024, cuando autoridades al fin abordan el hecho que se sabía por debajo: “en esta zona, mata y desaparece el narco”.
“Se ha detenido gente de Jalisco, de Guerrero, del Estado de México, ahora ya de Puebla e incluso de Chiapas y Michoacán. Lo que aquí sobresale más es el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco, y ambos están reclutando gente de otros estados. León es una de las ciudades más importantes de la República, la tercera más poblada y es muy industrial también. Todo eso llama la atención”.
Así lo anunciaba el secretario de Seguridad, Prevención y Protección Ciudadana, Jorge Guillén Rico, tras una detención de alto nivel en León. Y eso es de este lado, ya que en los tres municipios del “triángulo de las desapariciones”: Jalisco, Michoacán y Guanajuato, las autoridades han identificado modus operandi similares y que han derivado en el hallazgo de fosas clandestinas con alta cantidad de cuerpos.
En palabras de Alfredo Tapia Navarrete, titular de la Comisión de Búsqueda de Personas Desaparecidas en 2022 exponía:
“Toda la zona es foco rojo; seguramente se dieron cuenta, acabamos de tener una reunión interregional con Colima, Michoacán, Guanajuato, Estado de México, Querétaro y Guerrero porque estamos trabajando en seguridad y estamos poniéndonos de acuerdo para atender la zona. El foco rojo más álgido está en los límites con Jalisco, Guanajuato y Michoacán por el fenómeno del crimen organizado en las zonas limítrofes”.
Casos de desaparecidos entre Guanajuato y Jalisco
Fuera del discurso oficial, desde 2023 y poco antes, los colectivos de buscadoras y buscadores de personas desaparecidas en Guanajuato ya advertían que las ofertas de trabajo eran una forma de operar de la delincuencia organizada para desaparecer personas. Incluso, desde entonces notaron que el estado de Jalisco era un punto de encuentro para supuestas labores que terminan en un reporte de desaparición.
Y a lo que entonces detectaron, les dieron razón los casos:
“Siete familias de León sus familiares se desaparecieron en Jalisco, ya tienen un año. Son hombres, cuatro iban para Jalisco a trabajar y los desaparecieron en el camino y tengo otros tres que se acaban de integrar y también iban a trabajar y los desaparecieron (…) no tenemos más información”, explicó Rocío del Carmen Gómez, representante del colectivo Unidos por los Desaparecidos en 2023.
Este último se trata del caso del 27 de octubre del 2022, cuando Francisco Omar, Jesús Jhovanny, José Alberto y Rubén, originarios de Guanajuato, fueron a descargar un tráiler en Jalisco cumpliendo su trabajo sin pensar que sería la última vez que podrían comunicarse con su familia. A tres años del hecho, las familias siguen sin respuesta sobre qué pasó con ellos y dónde están.
Otro caso más fue el de Juan de Dios Sánchez Conde y Óscar Gael Mendoza Cardona, dos jóvenes de 21 años que desaparecieron el 16 de mayo del 2024 en su camino a Guadalajara. Aunque entonces, generó alta movilización de la población, a un año de la última vez que se supo sobre su paradero, continúan sin saberse más detalles.
Pero la cifra es, cuando menos, mucho mayor y es que para saber la cifra negra hay que tener en cuenta que varios de estos casos se vinculan incluso a accidentes viales. Esto es algo que documenta el Comité Universitario de Análisis en materia de Desaparición de Personas de la Universidad de Guadalajara, cuyo reporte, aún no definitivo, ya advierte ciertos detalles similares entre casos, como lo es la desaparición en contexto de conflictos interpersonales provocados por percances o accidentes.
Un caso que advierte estas señales fu el de José Mauricio Bonilla. Se trata de un joven leonés a quien sus familiares habían reportado como desaparecido desde la madrugada del 17 de noviembre, pero que tres días después fue localizado sin vida. Se dijo entonces que falleció en un presunto accidente en Lagos de Moreno, Jalisco. Sin embargo, esto no fue confirmado.
De un lado y el otro: los casos de desaparecidos entre Jalisco y Guanajuato
Y así como Mauricio, en las carreteras la desaparición no ha sido solamente en un sentido. Otro caso fue el de Karen Aguilar, una joven madre que desapareciera en su tránsito de Lagos de Moreno a Guanajuato en 2022. Pero cuyo automóvil sorpresivamente fue hallado hasta Hidalgo y a ella sin vida en Guanajuato.
Para agosto del 2023, el caso de Benito, Paco y Abraham también ensombreció a la ciudadanía. Se trataba de tres primos de Jalisco que desaparecieron en su tránsito a Michoacán y que lamentablemente fueron hallados sin vida en Pénjamo, Guanajuato unos días después.
Este tipo de casos han llevado a también en Guanajuato intensificar la búsqueda de personas originarias de Jalisco. Esto ha llevado al hallazgo de personas como el caso de un hombre de 50 años que fue privado de la libertad en Lagos de Moreno y que lamentablemente fue encontrado sin vida en la comunidad de Lagunillas en León en 2024.
Entre otros casos de hallazgos de restos humanos en los límites de ambos estados entre zonas deshabitadas y carreteras. Y el más reciente hallazgo en Teuchitlán, Jalisco, para donde La Comisión Estatal de Atención Integral a Víctimas (CEAVI) de Guanajuato ha recibido cinco solicitudes de buscadoras para acudir al estado de Jalisco a cotejar los hallazgos.
Aunque ayer se habilitaron dos links para la búsquedas a través de los registros fotográficos de lo encontrado en el lugar, la necesidad de parte de los colectivos Madres Guerreras, Buscando a Pablitos y Unidos por los Desaparecidos de León, además de dos buscadoras independientes llama incluso a un viaje de reconocimiento que aún no ha sido autorizado.
El pasado 5 de marzo por una llamada anónima, integrantes de colectivos independientes de búsqueda, encontraron en la comunidad Izaguirre, en Teuchitlán, Jalisco, tres crematorios clandestinos, más de 200 pares de zapatos, prendas de hombre, mujer, niños y demás relojes, collares, anillos, pulseras, dijes, maletas, mochilas, bolsas y más, así como libretas con cartas de despedida y cinco lotes de restos óseos fragmentados.
Por lo que esta semana las madres buscadoras acompañadas por personal de la Procuraduría de los Derechos Humanos y Comisión Estatal de Búsqueda, acudirán a una entidad del norte del país para proseguir con sus actividades.
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