Con 57 años de tradición, regresa la Peregrinación de los Pajaritos en honor a la Virgen de Guadalupe en Celaya
Peregrinación de los Pajaritos en Celaya. Foto: Martín Rodríguez
Celaya, Guanajuato.- La señora Ascensión Delgado Pedraza de 91 años, fue una de las fundadoras de la tradicional ‘Peregrinación de los Pajaritos’, que cada año llevan decenas de aves al Santuario de Guadalupe en honor a la virgen. Este año cumplen 57 años asistiendo de manera ininterrumpida.
Ascensión contó que la peregrinación empezó en 1966, sólo con su pequeño hijo de dos años y su sobrino de la misma edad, a ambos los llevaron a misa con una pequeña jaula en su espalda y en la cual llevaban pajaritos. El sacerdote que oficiaba la misa le gustó tanto el cantar y colorido de las aves, que les pidió que regresaran el siguiente año.
Al siguiente año, Ascensión llevó a sus 10 hijos y a sus sobrinos y a más personas que invitó y logró llevar en peregrinación al Santuario de Guadalupe. Con el paso de los años, se fueron juntando más adeptos y se integraron vendedores de aves cantoras y de ornato.
“En un día como hoy que se festeja a la Virgen de Guadalupe, un compadre mío trajo al templo a dos niños pero no entraron a misa, se quedaron aquí afuera con sus pájaros en sus jaulitas, entonces los niños vestidos de indios, uno era mi hijo y el otro mi sobrino, se quedaron afuera para no interrumpir, pero al padre le gustó mucho que los pájaros estaban cantando y les dijo que si no podían el siguiente año traerlos, y así empezó, el siguiente año ya nos organizamos más, ya para el siguiente año nos organizamos, traje a todos mis hijos, a mis niños y mis niñas. Vienen unos compañeros que venden también pájaros y los invitamos también”, platicó Ascensión.
A partir de ahí surgió la peregrinación que se ha convertido en una tradición en Celaya.
Cada año la peregrinación llega a la misa de 11 de la mañana y dejan en el altar las jaulas de las aves durante gran parte del día, se escucha el cantar de decenas de gorriones, canarios, cardenales, jilgueros, loros, periquitos australianos, entre otros, que cantan mientras centenas de personas acuden a rezar a la Virgen.
Después de unas tres horas y de alegrar con su canto las misas, las aves son recogidas y nuevamente regresan en peregrinación a su hogar.
La familia Medina Delgado son los iniciadores de la Peregrinación de los Pajaritos, son de la colonia Las Insurgentes y los vendedores de pájaros que acuden cada año son de distintas partes de la República.
Cabe destacar que los vendedores de aves que las llevan a misa a manera de bendición, también llevan a sus hijos e hijas y así es como se ha ido transmitiendo la tradición de generación en generación.
Hasta antes de la pandemia era una tradición que cada 12 de diciembre, los padres de familia llevaran a la “Misa de los Pajaritos” a los niños vestidos de inditos y a las niñas de lupitas en honor a la Virgen de Guadalupe. Este año también se notó a infantes, pero en menor cantidad que años pasados.
La señora Ascensión dijo que lo más grande que puede tener una persona es la fe y el amor a la “Santísima Virgen de Guadalupe” y destacó que ella va a seguir con la tradición hasta que pueda hacerlo, ya que además de que ya es una tradición, desde siempre le ha gustado llevarle a la Virgen de Guadalupe a las aves de colores y su cantar, ya que se siente en el templo cierta magia.
Rezan a la Virgen porque regrese la paz a Celaya
Tras los hechos violentos que han sucedido en Celaya en los últimos años, pero sobre ahora que conmocionó a gran parte de la sociedad el asesinato de seis jóvenes, cinco de ellos estudiantes de medicina, así como otros hechos delictivos que suceden en la ciudad, el Rector del Santuario de Guadalupe, Mario Pérez Vélez, pidió en las misas por que regrese la paz, que haya seguridad y por la conversión de las personas malas.
El Rector del Santuario, durante la homilía, pidió a la Virgen que interceda por los celayenses y a los fieles les dijo que, aunque haya momentos que se tenga miedo, se tiene que ser fuerte y valiente y pedir a la “Santísima Madre que haya seguridad y paz en Celaya.
“Debemos dirigir nuestra mirada a nuestra Madre para pedirle por nuestra patria y por nuestra ciudad, pedirle por todos aquellos que sufren por esta situación tan dolorosa que como sociedad estamos viviendo, queremos pedirle que nos tenga en sus ojos, que nos bendiga, que transforme los corazones de aquellos que se han desviado en su caminar, que limpie los corazones de aquellos que sin clemencia alguna están haciendo sufrir a nuestra sociedad”, señaló.
El sacerdote mencionó que es necesario sentir el dolor ajeno y ser empático, para poder pedir a la Virgen y a su hijo Jesús que “nos alcance la paz”.
“Anhelamos esa paz que a muchos de nosotros, a los mayorcitos nos tocó vivir, que podíamos salir sin ninguna dificultad a la calle, que podíamos ir aquí y allá sin miedo y sin temor, porque teníamos una sociedad tranquila, queremos pedirle a nuestra Madre el don de la paz, que nos bendiga con la paz, que ya acabe este sufrimiento que hermanos de la misma comunidad, de la misma sociedad están provocando porque sus caminos se han desviado del camino del señor y nos hemos reunido como familia para ponernos al pie de nuestra madre”, mencionó.
