Contingencia por incendio en basurero afecta a comerciantes en Guanajuato... pero igual trabajan
Ante el cierre de negocios de la ciudad de Guanajuato, algunos se han visto en la necesidad de no acatar las medidas preventivas tras el incendio del basurero
Guanajuato, Guanajuato.- “Si no vendemos no comemos”. Comerciantes, guías y restaurantes abren pese a la contingencia generada por el incendio del tiradero municipal en Guanajuato.
Ante el cierre de negocios de comida, bares, cantinas y restaurantes, negocios establecidos, ambulantes y guías turísticos de la ciudad capital de Guanajuato se han visto en la extrema necesidad de no acatar las medidas de prevención recomendadas por la autoridad estatal y municipal por el incendio de basurero municipal.
En las populares plazas como Baratillo, Jardín Unión, Plaza de la Paz, San Fernando, Mercado Hidalgo, Alhóndiga de Granaditas y Embajadoras solo algunos comercios ambulantes y negocios establecidos se han atrevido a abrir sus puertas para turistas y locales que deseen comprar sus productos o servicios, así como lo guías y promotores turísticos.
En palabras de Chuy, promotor turístico de la zona de la Alhóndiga, aún con la contingencia él debe buscar sacar para la comida.
“Aquí no somos como los políticos. Aquí le trabajamos así llueva, truene y relampaguee, si no vendemos, no comemos en el día (…) si no llevo algo a mi casa mi hija no come, mi esposa no come y aquí es de arriesgarse” comentó.
En tanto, en el Mercado Hidalgo, sitio de venta de todo tipo de productos, parece que la vida sigue normal, pues solo unos cuantos si han abierto sus puertas a los locales y foráneos que quieran fruta, verdura, comida corrida, recuerdos, platillos económicos, carnes frías, y en el segundo piso, algún artículo de ropa, pero en su mayoría quien abre son los dueños de negocios que los 365 días del año mantienen su servicio.
A las afueras, en Gavira, los comercios ambulantes de ropa, especias, utensilios, insumos y variados se nota que menos del 50% de comercios ha arriesgado en abrir, pues no quieren perder un empleado por unos días, pero aun así quien se arriesga cuentan que “la vida es un riesgo y nosotros no podemos darnos el lujo de no venderle a quien sea”
En las entrañas del centro, en la zona del Jardín Unión, solo un par de guías de turista se ven a lo lejos para ofrecer sus servicios de tour, mientras negocios de restaurante lucen solos, o con una o dos mesas de extranjeros que no saben que la capital atraviesa una contingencia ambiental.
En la zona, Don Pepe cuenta que nunca en sus más de 40 años de guía ha faltado un día, ya que su responsabilidad y temple no lo dejan darse un día de descanso, por lo que aún con cubrebocas se aventura a ofrecer sus servicios.
“Mire joven, así esté solo, siempre hay un cliente. Van varios días que nos dijeron que habíamos de cuidarnos y de evitar estar a la intemperie, pero yo no soy de guardarme. Somos de trabajo y aún con las medidas estamos al pie del cañón, sino, las cosas no llegan del cielo” culmino.
Tras la declaración de contingencia y suspensión de algunas actividades, los comercios de más de 20 años son los que prevalecen y abren sus puertas sin importarles tolerar los estragos de la nube blanca de humo que en el centro histórico ha amanecido por tres días, por lo que la vida comercial de la ciudad ha recibido un golpe considerable en las economías de algunos guanajuatenses.
