Reserva del Orito en Guanajuato tiene al guardián ideal: Esteban lleva 11 años como su guardabosques


Esteban ha protegido El Orito por 11 años. Foto: Correo
Guanajuato, Guanajuato.- Con más de 11 años de experiencia, el guardabosques Esteban Zarate ha dignificado la reserva natural protegida de el 'El Orito' en Guanajuato capital.
El parque ecológico “El Orito” ha sido por años un espacio vital para la ciudad por su inmenso espacio para la recreación y el cuidado del medio ambiente, y ha sido resguardado por el guardabosques, quien vigila las 145 hectáreas que comprenden está reserva natural protegida.
En exclusiva para Periódico Correo, Esteban revela que desarrolla actividades dentro del parque ecológico desde hace 11 años, posterior a ser delegado de su comunidad de Santa Ana, impulsado por su amor al medio ambiente y la cercanía del Orito con la dicha comunidad.
“Yo desde chico he caminado, aportado y trabajado para tener un parque lleno de vida, con mis chivas, burros y ya sabía quién vivía desde ese entonces a los alrededores y no perdí la oportunidad cuando me ofrecieron el puesto”, relató.
En el pasado, Esteban se desempeñó como albañil, minero, machetero, pintor o maestro, pero con el tiempo se terminó el trabajo "y llegué acá", destaca.
“Yo nunca pensé que me invitarían y no perdí esa oportunidad para cuidar este lugar donde rápidamente acepte”, recordó.

En un inicio, sus funciones fueron básicas, pero poco a poco, por su dedicación y labor fue aumentando sus actividades, que ahora van desde mantenimiento preventivo, recolección de basura, desechos orgánicos, campañas de reforestación, concientización voz a voz con los ciudadanos que acuden al parque e incentivar al cuidado de las áreas verdes y espacios destinados al esparcimiento social, así como no permitir la invasión del terreno.
“Al principio quería que me guiaran para conocer toda la extensión de las áreas naturales de dónde a dónde es junto a los soldados por La Venada, Puerta del Oro, Las Antenas, Santa Ana, Cerro de la Garita, Mina de Guadalupe (…) son 145 hectáreas a resguardo” aseveró.
Con el tiempo, Esteban reconoció que tomar la labor de salvaguardar la naturaleza fue una gran decisión, pues reafirmó su pasión por los espacios abiertos y la sensación de bienestar que genera rodearse de la naturaleza.
“Lo que es cuidar la flora y fauna me apasiona y con el resguardo aquí he conocido a muchas personas, desde estudiantes, adultos mayores, grupos de deportistas, de todo”, mencionó.
El trabajar en el mantenimiento de espacios se dio desde que en la Comunidad de Santa Ana se desarrollaron campañas en escuelas, presas, calles y alrededores para dignificar los espacios y es cuando Servicios Públicos impulso que estás actividades se hicieran con las herramientas correctas y proveer a la población de lo necesario para la limpieza.
“Ahí fue cuando conocí a Omar Rosas, al actual director hace muchos años me apoyo con campañas, agilizó poco a poco el trabajo y en el Orito antes con el cuidado a la tala y realizar un acercamiento social para que la gente tampoco invadiera”, comento.

También en temas de seguridad, la Policía Ambiental ayuda a que cualquier reporte se atienda.
“Me dio gusto que nos apoya al trabajo y los recorridos porque la gente se siente segura al estar vigilados, la población sabe que puede venir a realizar sus caminatas, recorridos en bicicleta y disfrutar de la áreas verdes”, apuntó.
A lo largo de muchos años, múltiples personas han querido invadir o han cercado terreno anexo al Orito y con todos se ha logrado dialogar para que respeten el bosque. Afirmó que taladores y pajareros ya no existen.
"Mi trabajo también es acercarme con quién trata de actuar mal para que vean que el espacio es de todos los ciudadanos y se debe cuidar para que dure en buenas condiciones por cientos de años", afirmo.
“La gente que cuida el medio ambiente sabe que mantener un lugar en buenas condiciones requiere mucha dedicación y las familias que vienen saben que aquí estará en buenas condiciones, si ellos también, cuidan las diferentes zonas especiales”, aseguró.

Uno de los retos más difíciles para Esteban ha sido el cambio de mentalidad con los cuevanenses para valorar el trabajo hecho en favor del parque ecológico y que así como lo encuentran en óptimas condiciones, así debe continuar para que familias enteras disfruten de sus fines de semana de campo, al aire libre.
“Mi reto es mantener este lugar bonito y cuidado, tenerlo mejor que antes y que la ciudadanía ayude a que así se quede, uno solo está canijo aún con algunos voluntarios que vienen”, enalteció.
El guardia forestal invito a todos los guanajuatenses a ser más conscientes de los espacios tan impresionantes que tiene la ciudad y la naturaleza con la que se cuenta, pues son el pulmón de todos. También exhortó a no ser tan descuidados al no recolectar su basura y sumarse a las campañas de limpieza en el Orito.
“Este lugar ha ayudado a muchas personas para cambiar su mentalidad, la naturaleza promueve que la gente que tienen problemas mejoren su calidad de vida al conectar de forma especial con el ambiente” finalizó.
JRP