¿Sabes qué pasó con los restos de Miguel Hidalgo y los demás insurgentes?
Guanajuato, Guanajuato.- Un acontecimiento de la mayor importancia, es cómo el Dr. José Eduardo Vidaurri Aréchiga, cronista municipal de Guanajuato, describe la exhumación de los restos humanos de los insurgentes Miguel Hidalgo, Ignacio Allende, Juan Aldama y Mariano Jiménez del Templo de San Sebastián:
"Es importante porque es la decisión de elevar a estos personajes al rango de Héroes Nacionales, nada más ni nada menos que el Padre de la Patria y los primeros caudillos de la independencia."
Exhumación de los héroes de la Independencia
En una entrevista para Periódico Correo, el Cronista municipal, Eduardo Vidaurri, nos narró este hecho histórico:
Las cabezas de los insurgentes llegaron a la ciudad de Guanajuato en octubre de 1811 después de un recorrido largo que comenzó en Chihuahua. Se tomó la decisión de exhibirlas en la Plaza Mayor (ahora Plaza de la Paz) debajo de la horca. El 20 de octubre se decidió dejarlas en la Ciudad de Guanajuato. Vidaurri relata:
"Se contrató a un herrero para que hiciera unas jaulas, se colocó cada cabeza en una jaula y se ubicaron en las esquinas de la Alhóndiga (de Granaditas). Permanecieron allí hasta el 28 de marzo de 1821".
A partir de esa fecha y hasta el 31 de agosto de 1823, estuvieron sepultadas en el panteón de San Sebastián; fue entonces cuando en ese mismo año el Congreso Nacional sesionó con un propósito en particular: definir un reconocimiento y un desagravio a los personajes que construyeron nuestra libertad nacional:
"Este proceso fue avanzando al grado de que se convirtió en la definición de los primeros héroes de nuestra patria".
En este acuerdo también se incluyeron los restos de otros insurgentes que yacían en otras entidades, como Francisco Javier Mina y Pedro Moreno.
El 31 de agosto de 1823 se llevó a cabo una procesión solemne con los restos humanos de los insurgentes del Panteón de San Sebastián al Templo Parroquial de Santa Fe, ahora Basílica Colegiata de Nuestra Señora de Guanajuato, donde se realizó una velación:
"En el transcurso de esa noche llegó la cabeza de Pedro Moreno, que se encontraba sepultada en Lagos (de ahí su nombre actual, Lagos de Moreno), y también llegaron los restos que se lograron localizar de Francisco Javier Mina. Todos juntos se colocaron en una urna".
El primero de septiembre de 1823, hace 200 años, se llevó a cabo una procesión hasta la Garita de Pardo, donde terminaba en ese entonces la ciudad de Guanajuato. Vidaurri comenta:
"Ahí se entregaron a un conjunto de soldados que custodiarían estos restos hasta la Ciudad de México".
¿Dónde fueron sepultados los restos de los héroes de la Independencia?
Al llegar a la capital de nuestro país, la urna fue sepultada en la Catedral de la Ciudad de México, y alrededor de 1925 - 1929, se trasladaron a su destino final, el Monumento a la Independencia (Ángel de la Independencia).
Este relato histórico es una muestra más de la importancia de la Ciudad de Guanajuato en el marco histórico de la construcción de nuestro país como un estado libre.
¿Conocías este pasaje tan importante en la historia de nuestro país?
LC