Esto fue lo que encontró la FGE en la casa de Juan David que podría dar un giro al juicio en Irapuato
Buscan que el caso de Juan David tenga justicia en Irapuato. Foto: Archivo
Irapuato, Guanajuato.- La investigación iniciada por la supuesta huida de Juan David, niño de 11 años desaparecido en Irapuato, cambió a una investigación de desaparición forzada y violencia familiar, luego de que los peritos encontraron manchas de rojas en diferentes prendas y rastros de sangre en el baño de la casa en la que Juan David vivió los últimos seis años en los que se supo de él; fue revelado en el juicio oral.
En el tercer día del juicio oral por el caso de la desaparición cometida por particulares y violencia familiar en agravio de Juan David, algunos de los peritos criminalistas que participaron en la investigación presentaron ante el Tribunal de Enjuiciamiento la evidencia y dictámenes realizados en torno a la investigación que originaron este proceso.
Relataron que la primera vez que entraron a la casa de Juan David fue la tarde del 16 de mayo, un día después de que la mamá de Juan David presentó la denuncia por desaparición del menor y comprobaron que el niño no estaba en cada de su papá biológico.
Los peritos contaron que se revisó los lugares por donde el niño pudo haber escapado, ya que se presumía que el niño había escapado por la venta de la sala, pero en ese lugar no se encontró rastros genéticos, ni de ropa de que alguien hubiera podido pasar por los espacios de 30 x 16 centímetros en promedio que tienen los barrotes de varillas de las ventanas, sólo había una mancha como que alguien presionó la misma con su cuerpo, pero sin ninguna huella.
¿Qué se encontró en la casa de Juan David?
Lo que sí se encontró ese día, fueron dos libretas en cuya portada estaba el nombre en color azul de Juan David, una era de la materia de historia en donde el niño realizó cinco planas y media de “me he portado mal”, y es escrito en donde señalaba “Todos los días debo apoyar a mi mamá con los debes porque hace mucho por mí…”.
También fue encontrado un cuchillo, dos limas con manchas rojas, así como una colchoneta con manchas rojas por salpicaduras, de las cuales no hubo datos concluyentes, al no poder obtener material genético para su análisis.
En la segunda revisión a la casa, realizada el 18 de mayo, un día después de que el padrastro Miguel Ángel fue detenido por la Policía Municipal fueron encontrados un pantalón con una mancha roja en la parte trasera, unos tenis sucios y al revisar la casa con luminiscencia se detectaron tres zonas con rastros de sangre, la cual había sido limpiada de la superficie; esos lugares eran en el lavabo del baño, en el muro izquierdo del baño y en la puerta del lado interno del baño, en donde había un escurrimiento de aproximadamente 40x20 centímetros.
En esa ocasión ya no solo se investigaba la huida de un niño, sino la posible comisión de un delito y la presunta responsabilidad de los adultos que vivían en ese hogar.
También fue presentado como evidencia el teléfono celular de la mamá del niño, en donde había fotografías del pequeño Juan David, unas del festejo del 10 de mayo en donde se veía claramente lesionado.
Y es que fue ella quien por propia voluntad se acercó el Ministerio Público para ampliar su declaración y ahora sí contar la verdad de lo que había sucedido, según relataron agentes ministeriales que recabaron la entrevista en donde aseguraron que la señora Reina había manifestado tener mucho miedo a su pareja, y temer por lo que les pudiera pasar a los hermanitos de Juan David, por lo que había decidido hablar.
Aislaban a Juan David
El abuelito de Juan David, el señor Artemio contó en el juicio oral que pocas veces pudo ver a sus nietos, a Juan David y Giovanni, pues la mamá de los niños no quería que tuvieran contacto con su papá Agustín, por lo que las veces que lo llegaron a ver el papá del niño no podía estar presente.
En esas visitas, aseguró que sí lo vieron lesionado con moretones en la cabeza y una vez con una mano fracturada, de las cuales no querían preguntar mucho por no incomodar a Reina y que los siguiera llevando, pero era evidente que algo estaba pasando, lo poco que les dijo la mamá de Juan David, fue que el niño se cayó del caballo y se había roto el brazo, versión contraria a la dada por la vecina de los niños, la señora Juanita, a quien Miguel Ángel le dijo que fue resultado de un asalto.
En los siguientes días serán presentada más evidencia y testimonios en torno a este caso para que se dé a conocer la verdad de lo que ocurrió la madrugada del 13 de mayo del 2022 entre la media noche y las cuatro y media de la mañana, lapso en el que se presume según el testimonio de la mamá de Juan David, el niño fue sacado de la casa por su padrastro, quien regresó sin el pequeño.
