Libia Dennise: presiones y resistencias
1.- Libia Dennise: presiones y resistencias
Los varones al frente de los partidos políticos se han llenado la boca sobre el empoderamiento de sus candidatas a la gubernatura. Al tener una contienda entre mujeres, puertas afuera los discursos se han plagado de odas a la equidad, pero puertas adentro persisten las resistencias y, sobre todo, las presiones para ejercer poder o al menos influencia política sobre ellas.
El caso de Libia Dennise García Muñoz Ledo es paradigmático no sólo por ser la primera abanderada estatal del PAN, también por reclamar el liderazgo político de su campaña e incluso trasladar ese mensaje a su discurso ofreciendo un “Nuevo Comienzo”, marcando su línea respecto a las prioridades y líneas de gobierno adoptadas en más de 30 años de gobiernos blanquiazules.
De entrada, la postura de Libia anunciando cambios, renovaciones e incluso despidos adelantados como los del gabinete de seguridad, han causado expectativa no sólo por sus señales de autonomía, también por la actitud que adoptaría el grupo oficial en torno al gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, que lidera el jefe de gabinete Juan Carlos Alcántara.
Aquí es importante recordar el punto de inflexión que significó el cambio de año, cuando errores operativos por poco le generaban escollos a la candidata de la coalición Fuerza y Corazón por Guanajuato. Entre la fallida entrega de los apoyos Mujeres Grandeza a través del ISSEG y la contratación de proveedores de comunicación misóginos, tuvo que tomar decisiones.
A partir de ese momento la campaña de Libia Dennise tomó cierto orden y cauce, completamente en manos de su equipo conformado principalmente por egresados de las filas de Acción Juvenil que de las labores operativas ahora reclaman su lugar en las directivas. Es entonces que se dio un delicado quiebre con el grupo oficial.
Trascendió que la semana pasada comenzaron los reclamos y los reproches sobre Libia, luego de haber allanado el camino para su postulación y de haber armado la plataforma que haría viable su candidatura. Como muchas otras cosas en la política, el tema son los pesos y los centavos recaudados para la causa, que ahora le están escatimando.
Es por lo anterior que ahora Libia y su equipo deberán, ahora sí, tomar las riendas de forma total, incluso en las labores de gestión, o bien, administrando los recursos ordinarios que vendrían del Comité Directivo Estatal que preside Eduardo López Mares quien, por cierto, se mantiene apegado al grupo oficial.
De hecho, como están las circunstancias, valdría la pena que en el cuarto de guerra de la candidata reconsidere las aportaciones -aún limitadas- que les ofrecen sus aliados del PRI y el PRD, hasta ahora rechazados por el oficialismo. Si la independencia y autonomía van en serio, todo ayuda para hacerlas valer.
2.- La contienda por León: ventajas y caras nuevas
Si hay un municipio en el que se ha supuesto una victoria segura del PAN para la presidencia municipal, ese es León. Sin embargo, encuestas como la de TAG Research que Correo publica este lunes deja en claro que no para nada se tratara de una día de campo para la abanderada panista, Alejandra Gutiérrez Campos y, en todo caso, se está a las puertas de un Ayuntamiento plural.
De entrada llama la atención el mismo fenómeno entre los partidos y sus candidatos. Intenciones de voto que se modifican radicalmente en un sentido o en otro, al hacer la pregunta por separado, revelan dónde está el peso de la marca y donde empieza realmente el de la candidata o candidato. Esa correlación tiene hasta ahora a la edil con licencia con 10 puntos de ventaja.
De entrada está la aceptación del gobierno de Ale Gutiérrez. Un 56.1 por ciento de los ciudadanos entrevistados aprobaron su gestión como presidenta municipal de León, lo cual establece un primer reto que depende definitivamente de ella misma y que tiene que ver con su premisa de campaña sobre “ver de frente a la ciudadanía”.
Si hoy fuese la elección a presidente municipal y solo compitieran los partidos políticos sin candidatos, el PAN ganaría los comicios sobre Morena apenas con una ventaja de 5.4 por ciento, incluso cuando este último partido llevó al extremo sus definiciones para postular finalmente a la exregidora, Vanessa Montes de Oca, quien hasta ahora sólo le agrega tres puntos a la preferencia por la 4T.
En lo que toca al resto de los partidos, resalta el caso de Movimiento Ciudadano con Juan Pablo Delgado quien, con su 15 por ciento de conocimiento alcanza un 4.8 por ciento de intención de voto ratificándose por encima de Gerardo Fernández González del Partido Verde que apenas llega al 3.3 por ciento. Así que la moneda está en el aire para la tercera fuerza política de la ciudad.
Así que sea o no por la marca, las campañas en León inician con la sensación de disparidad pero también de expectativa, en una contienda en la que ha quedado clara la exigencia ciudadana de más y mejores perfiles en la política local.
3.- El turbulento inicio de las campañas municipales
El arranque de las campañas municipales tuvieron su momento más álgido justo antes de comenzar. El uso de una nueva plataforma de registro, las prisas de los partidos que definieron sus candidaturas sobre la hora, así como un clima político cada vez más crispado, extendieron por 12 horas la jornada en el Instituto Electoral del Estado de Guanajuato (IEEG) previa al inicio de las contiendas.
Claro, la nota fueron las 29 candidaturas rechazadas a Morena y PT, pero el resto de los partidos no se quedaron sin su dosis de incertidumbre, pero sin duda las tensiones comenzaron con la tardanza en el nuevo sistema completamente digitalizado, en el que los rechazos por cartas de residencia mal redactadas -o mal escaneadas- fueron recurrentes.
Obviamente los representantes de partidos como Morena y PT, acusaron que el sistema de registro digital falló, pero los consejeras y consejeros del IEEG contestaron con fallas que sí tenían que ver con el registro en el sistema, pero de los partidos pues faltaban firmas electrónicas o no se subieron los documentos completos.
La movilización fue casi inmediata a partir de la figura del secretario general de Morena, Jesús Ramírez Garibay, quien encabezó las protestas de sus correligionarios pese a no tener definición ni razón concreta de los errores señalados, sobre todo para las candidaturas de Juventino Rosas, Santa Catarina, San José Iturbide y Tarandacuao que deberán pelear en tribunales.
Al final, al PRD le declararon la candidatura no presentada en San José Iturbide y rechazaron la de Villagrán. Al PT le declararon como no registrados un total de 24 candidaturas y a Morena las cuatro mencionadas. El PAN tuvo que ajustar candidato en Santiago Maravatío y el PRI se fue limpio.
Sólo como apunte, para las solicitudes de registros de candidaturas hubo un periodo que comprendió del 15 al 21 de marzo, sólo que en esas fechas había partidos aún en picota asignando o negociando lugares. Así las cosas.
CONTRA RETRATO
Carlos Zamarripa Aguirre
Ni con un anuncio anticipado y un contexto adverso parece templarse. Su agenda de frentes abiertos se mantiene inamovible no obstante las obligaciones propias de su cargo. Todo indica que mantendrá su misma postura, asignando las advertencias de su salida en el mero terreno de la política electorera.
El titular de la Fiscalía General del Estado, Carlos Zamarripa Aguirre, ha decidido no ceder ni un ápice en casos como el de los supuestos daños cometidos por siete estudiantes de la Universidad de Guanajuato (UG), incluso por encima de la determinación de la rectora general Claudia Susana Gómez López, que prometió que quedaría sin efectos.
De entrada habría que recordar que todo apunta a una complicidad directa del fiscal con el exrector Luis Felipe Guerrero Agripino, con quien ya fraguó la fabricación de una absurda denuncia por secuestro para frenar la acción penal particular que esta casa editorial solicitó por el allanamiento que este perpetró junto a una cincuentena de funcionarios universitarios.
Ya sea por soberbia o por una amistad ciega, Zamarripa mantiene inamovibles ambas causas evidenciando la misma capacidad facciosa e inoperancia, por la que se ha reclamado y adelantado su dimisión de la FGE.
Ahora ya nos sumergimos en la siempre caótica coyuntura electoral, en la que antes el fiscal no tuvo empachos en intervenir pero para enrarecerla más pese al clima de violencia política que ha impactado en todos los partidos. Una última etapa que sin duda marcará su porvenir.