¿Qué está pasando en Salvatierra?
1.- ¿Qué está pasando en Salvatierra?
Definitivamente algo está pasando en Salvatierra. Un regidor de Morena que apenas salvó su vida al caer de uno de los balcones de la presidencia municipal y otro del PAN que ha sido acribillado en plena zona centro -todo en medio de la actividad criminal asentada en el municipio- son pésimas señales.
Aún más anómalo es que el aparato oficial se movilice en casos como los comentados, lanzando hipótesis y conjeturas criminalizadoras y revictimizantes, mientras el gobierno de Germán Cervantes Vega apuesta al mutismo apenas roto por comunicados de mero trámite.
La verdad es que en Salvatierra la política y la violencia ya conviven. Basta recordar que el alcalde panista en su segundo informe de gobierno, desplegó un grosero operativo de seguridad que rayó en la paranoia; cercaron el recinto y para entrar, policías revisaron bolsas y mochilas de los asistentes.
El gesto del alcalde cerró el mes de septiembre para comenzar un octubre enrarecido completamente.
Precisamente apenas dos días después del informe de gobierno, el regidor morenista Jorge Luis Zamora llegó visiblemente lesionado a la presidencia municipal. Una camioneta de Protección Civil lo dejó en la entrada y lo siguiente que captaron las cámaras fue su cuerpo precipitándose desde el segundo piso. Hoy se recupera favorablemente.
Ayer, nuevamente Salvatierra dio la nota trágica con el asesinato del regidor panista Alejandro Lanuza Hernández, quien fue acribillado a plena luz del día en el centro histórico. Acababa de salir de su domicilio, caminaba hacia la zona de los portales cuando fue sorprendido por sujetos armados.
Algo pasa en Salvatierra, ya que además de estos hechos, la cotidianidad de este “Pueblo Mágico” sigue inmersa en asesinatos en su zona rural y desapariciones en la zona urbana; en el colmo, el Barrio de San Juan sigue siendo escenario de inhumación clandestina de cadáveres.
El gran problema es que mientras el aparato oficial reacciona por él, Germán Cervantes se apega a su silencio como si la apuesta por un nuevo grupo de fuerzas especiales de la policía, distinguidos por una boina negra, pintados de la cara estilo camuflaje y portando armas largas, fuera suficiente.
2.- Agua para Guanajuato: otra mala noticia
La presa de Cabras en el municipio de Ocampo, es parte de un paquete de proyectos hidráulicos que se planteó de forma local, para luego ser elevado a un impacto regional que en realidad se concentraría en surtir de agua potable para León.
Al descartar que la Presa El Zapotillo del servicio de trasvase a Guanajuato, justamente la presa de Cabras fue rescatada para el discurso del gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo en diciembre de 2021, como un proyecto viable que no solucionaría, pero ayudaría a resolver la carestía en la ciudad zapatera.
Sin embargo, el nuevo planteamiento de tecnificar el riego en la zona Laja Bajío para liberar los metros cúbicos suficientes de la Presa Solís para surtir a los municipios del corredor industrial en contacto con el Río Lerma, eclipsó la presa de Ocampo por lo que quedó en un momentáneo olvido.
Ahora que sabemos que hay un Plan C propuesto por la Secretaría de Gobernación, Luisa María alcalde Luján, que más bien se concentraría en rehabilitar el sistema de presas existente en Guanajuato, nuevamente el proyecto ocampense parecía tomar sentido.
Sin embargo, a pesar de ser calificado ayer como una obra viable por Rodríguez Vallejo, este todavía no encontrará certeza en un gobierno federal que no se ha decidido por una postura concreta sobre el tema del agua en León.
Al final, lo único certero es que no habrá el siguiente año un avance claro en un plan para enfrentar el déficit en los acuíferos del estado de 484.45 millones de metros cúbicos.
3.- Claudia Silva: populismo sin freno
Apenas recibió la anuencia oficial para buscar la reelección y Claudia Silva Campos aceleró el paso. No sólo tenía que dinamizar su agenda, sino agregarle actos ‘populares’ cargados de fervor religioso. Así lo hizo sin reparos.
El miércoles pasado no tuvo empachos en trasladarse a la Ciudad de México para “recibir” en plena Basílica de Guadalupe, a los fieles acambarenses que realizan anualmente una peregrinación a pie. Faltaba más, la edil se montó en el acto religioso cargada de pan.
Como para todo en tiempos preelectorales puede tener una justificación, la edil encabezó a un contingente cargado con cajas del pan tradicional de Acámbaro para arrojarlo sin ton ni son a los presentes, en un acto de mal entendida beneficencia.
Las imágenes transmitidas en vivo desde su página de facebook, dieron testimonio del desparpajo.
Pero todo tiene una razón. En Acámbaro no hay nadie al interior de Acción Nacional que le compita por la candidatura a la presidencia municipal. La reelección la tiene a la mano Claudia Silva, pues el blanquiazul sigue encabezando la plaza.
De manera que la alcaldesa panista vive envuelta en la euforia a la que, de vez en vez, le da rienda suelta como hace dos noches mezclando religión y política sin el menor recato.
CONTRA RETRATO
Luis Ernesto Ayala Torres
Fue el número dos en los primeros tres años del gobierno de Diego Sinhue Rodríguez Vallejo. De hecho, parecía tener un relanzamiento político, pues ese cargo le fue conferido luego de ser síndico y alcalde interino de León. Hoy el mismo se descarta para reelegirse como diputado local.
Ayer, el también líder de la bancada del PAN en el Congreso del Estado, Luis Ernesto Ayala Torres, aclaró que sus intenciones políticas para el 2024 no es buscar mantenerse en el Poder Legislativo, sino regresar al trabajo partidario sin descartar otro cargo público.
Es un hecho que el otrora empresario zapatero ronda las mesas de negociación, en las que actualmente se litiga la repartición de espacios y candidaturas para el grupo que representa la alcaldesa de León, Alejandra Gutiérrez Campos, quien ya pidió el carro completo de la ciudad zapatera.
La gran duda ahora es si se le ofrecerán opciones a Ayala Torres, aun cuando se conoce su abierta postura crítica al mecanismo de decisiones que emplea el grupo oficial del PAN; por eso sólo duró tres años en el gobierno y terminó apoyando a Ale Gutiérrez.
“Es muy importante decir que decidí no presentarla, para mí el ciclo en la diputación concluye, voy a hacer campañas a favor del PAN en su momento, y nada más, hoy debo de ser muy claro en este sentido”, expresó el exalcalde.
¿Le depara algún otro cargo público a Ayala Torres? Parece que, al menos en este momento, no depende tanto de él, por lo pronto se libera de presiones y se enfila a terminar la legislatura.