Tejada, la reacción empresarial y el PAN
1.- Tejada, la reacción empresarial y el PAN
En junio pasado, más de 200 empresarios de Guanajuato, principalmente de León, reclamaron a los partidos políticos postular a ciudadanos que apelen al bien común, para después enarbolar su papel en la historia política del país y el estado. Sin mayores vueltas, demandaron espacios al PAN en el contexto de sus definiciones internas.
Hoy este mismo empresariado se dice escandalizado con la mera mención del presidente de la Confederación de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios Turísticos (Concanaco Servytur), Héctor Tejada Shaar, entre los aspirantes de Morena a la gubernatura, a quien le exigieron una posición apartidista como líder empresarial.
Hay un doble rasero con el que se mide el tema. Muestra de ello fue la rápida reacción del connotado empresario leonés Hugo Villalobos González que, con el antecedente directo de haber participado en el Comité Estatal del Frente Amplio por México, dijo esperar -casi exigir- el deslinde fulminante de Héctor Tejada que, sólo se tardó un par de días en llegar.
Ante esto, es ineludible pensar en aquellos líderes empresariales que llegaron a la burocracia en gobiernos panistas o a puestos de elección popular con el PAN; Juan Carlos Muñoz inició carrera en el PAN tras liderar la Canacar, Jorge Ramírez Hernández estuvo en Sapal tras liderar la Coparmex o José Arturo Sánchez Castellanos se convirtió en sindico tras ser el líder del CCE en León.
Resulta paradójico que el mismo sector empresarial que siempre se ha mantenido servil y complaciente ante los gobiernos del PAN -incluso haciendo alarde de ello, como cuando recordaron su participación en las diferentes marchas contra el gobierno de la 4T-, ahora no tolera que uno de ellos tenga algún acercamiento con Morena.
Por su parte, el dirigente estatal del PAN, Eduardo López Mares, evidenció el alivio que le causó el autodescarte de Tejada Shaar. Evidentemente daban por sentado que no hay empresario, al menos en Guanajuato, que vea con buenos ojos a la 4T y esto les rompe el esquema.
Pero en lo interno, fue una llamada de atención. El grupo oficial en torno al gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo no ha tenido las mayores consideraciones para un empresariado que intentó reclamar lugares a través de la cruzada que emprendió la alcaldesa de León, Alejandra Gutiérrez Campos. Con el asunto de Héctor Tejada, la necesidad de abrirles un espacio queda patente.
2.- PAN y PRI: una alianza que divide
Mucho explica que apenas el 54 por ciento de los militantes del PAN acepten la conformación de una alianza electoral con el PRI. Decidir en un sentido o en otro compromete, aún más, la estabilidad del blanquiazul que requiere más que nunca evitar tropiezos y encontronazos internos.
También exhibe las razones que tuvo el Comité Ejecutivo Nacional del PAN en delegar esta decisión al ámbito estatal, pues al provocar opiniones divididas el análisis requiere el reconocimiento de las estructuras municipales de donde provienen la mayoría de los enconos y resistencias.
Es por lo anterior que el líder estatal del PAN, Eduardo López Mares, quien se encuentra dentro del 47 por ciento que rechaza la alianza, aclaró que el análisis implica definir municipio por municipio; si bien hay plazas en las que el tricolor les puede aportar, hay otros donde definitivamente las posibilidades de una alianza va cuesta arriba.
Uno de estos últimos casos es el de San Miguel de Allende, donde es evidente que los números y la capacidad de movilización están con el alcalde Mauricio Trejo Pureco, quien estaría encantado de buscar la reelección abanderado por PAN, PRI y PRD, por lo que ha intensificado los mensajes a los blanquiazules que siguen concediendo lugar a Luis Alberto y Ricardo Villarreal García.
Esa resistencia ha motivado que el edil sanmiguelense les ponga en perspectiva ya no sólo la contienda por la alcaldía, sino los distritos locales al afirmar que los perfiles del PAN los ponen en riesgo. Convencido está de que no se debe menospreciar el capital político con el que todavía cuenta el PRI.
El gran tema es que para el PAN la influencia del PRI está pulverizada. Fuentes al interior han explicado que no se trata de una gran fuerza estatal, sino estructuras municipales que se pueden revisar en lo individual sin necesidad de una negociación mayor.
“El PAN necesita del PRI frente a Morena”, es la sentencia de un alcalde como Trejo Pureco que luce como uno de los pocos liderazgos tricolores con un capital propio que es negociable por separado, ¿el PAN entrará en esa dinámica? En poco tiempo lo sabremos.
3.- Comude: reacciones tardías
La responsabilidad de la Comisión Municipal del Deporte de León que dirige Isaac Piña Valdivia, en torno a las denuncias de abuso sexual en el seno de la escuela de Karate Do, cayeron por su propio peso.
La carencia de un protocolo, el desinterés en las estudiantes víctimas y la evidente lenidad con la que se atendieron las acusaciones, terminaron por evidenciar la vulnerabilidad que hay en las escuelas de iniciación deportiva de la Comude, así como la anómala relación que la descentralizada sostiene con las asociaciones deportivas.
Al recurrir al despido de los profesores de karate acusados de abusar por lo menos de cinco menores de edad, hay una aceptación tácita de responsabilidad, la misma que buscaron evadir con aquel comunicado que buscó justificar la falta de actuación de la dependencia argumentando que no hubo notificación alguna de la investigación emprendida.
Ayer mismo el desconcierto privó entre los padres de familia que encontraron puertas cerradas en el dojo ubicado al interior de la Unidad Deportiva Enrique Fernández Martínez. Sin previo aviso las clases fueron canceladas por lo que el cese de los profesores se dio en medio de la opacidad.
La Comude de Isaac Piña no sólo tardó en reaccionar, sino que lo hizo de forma errática, incluso dando la oportunidad a los acusados de controvertir la decisión por la vía laboral.
Ahora resta conocer tanto el camino legal de las cinco denuncias penales que ya están en curso, como la obligada revisión de los recursos públicos que además los profesores han recibido como representantes de la Asociación Estatal de Karate, un paso fundamental para entender las raíces que les empoderó.
CONTRA RETRATO
Alejandra Noemí Reynoso
Sin tomar partido en la disputa por la candidatura del PAN a la gubernatura, al no mostrar complacencia al oficialismo ni una postura crítica exacerbada, salió airosa de la pugna interna como una tercera aspirante que se ha hecho necesaria para su partido. Hoy podría salir tablas en la repartición de espacios.
La senadora Alejandra Noemí Reynoso supo hacerse de un lugar como una férrea opositora con aspiraciones de gobernadora. Consciente de que la cargada panista no le favorecía, como tampoco un papel de adversaria, se mantuvo firme sin ser un agente tóxico lo cual seguramente el grupo oficial en torno al gobernador Diego Sinhue le agradeció.
Fue así que llegó hasta la última instancia en las negociaciones para lograr, al menos, que se le respete su desempeño como legisladora federal durante un sexenio donde el PAN requirió de voces críticas y consistentes frente a la 4T.
Pero no sólo mantuvo un papel opositor clave -de lo poco que pudo ofrecer el PAN en la materia-, la “Wera Reynoso” buscó afianzar una agenda propia que ahora avanzó a una iniciativa que pretende fijar una ley general en materia de atención al cáncer, que muy probablemente no prospere que mucho pondrá sobre la mesa de debate.
Es justamente la disposición de medicamentos y tratamientos públicos contra el cáncer, uno de los temas que le hicieron crisis a la 4T, con los cambios que de golpe y porrazo ejecutaron para consolidar las compras médicas y aparentemente limpiarlas de corrupción.
De manera que mientras los acomodos se afianzan, “la Wera” mantiene su paso.
