Cambio climático ya afecta a Guanajuato: temperatura sube casi 3 grados en 30 años
Sequía en la Presa del Palote en León. Foto: René Fúnez
León, Guanajuato.- En los últimos 30 años, el promedio de la temperatura máxima anual se ha incrementado en casi 3 grados centígrados en el estado de Guanajuato. Esto, entre otras cosas, permea como una consecuencia “real” del cambio climático.
Según los resúmenes mensuales de temperaturas y lluvias del Sistema Meteorológico Nacional (SMN), de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), en el año de 1992 se marcó una temperatura máxima promedio de 25 grados centígrados, aunque entonces, el mes más caluroso fue junio con poco más de 28 grados.
Sin embargo, el promedio anual de la temperatura máxima se ha incrementado hasta los 27.9 grados centígrados, de acuerdo al mismo reporte concerniente al año de 2022. Para este último corte anual, el promedio más alto por mes se dio en mayo, con hasta 33 grados centígrados.
“Creo que estamos comenzando a experimentar de una forma más real las consecuencias del cambio climático”, señaló el catedrático y coordinador adscrito al plantel de León de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el doctor Aarón Vélez, que ha estudiado los efectos del cambio climático, principalmente en la agricultura.
“No es normal; a veces la gente dice 1.5 grados no es mucho, pero sí lo es en términos generales a lo largo de los años porque es consistente. A nivel global, la temperatura va por ahí de los 2 grados, pero el efecto a nivel planetario o a nivel país es muy grande”, dijo el especialista.
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Temperatura impacta en las plantas y los cultivos
En Guanajuato y en los diversos rincones del mundo, el calentamiento global implica que las plantas se desarrollen con mayor velocidad, lo que impacta también al crecimiento de los frutos y genera afecciones en el cultivo cuando se trata de temporal, por ejemplo.
“Afecta cuando es de temporal, porque sembraron y no ha llovido, o llueve fuera de tiempo, y el tractor no puede entrar o algo porque fue antes de tiempo. El patrón de lluvias afecta mucho porque no se puede sembrar”.
“A mayor temperatura, las plantas tienden a desarrollarse más rápido. (…) Su fotosíntesis y el desarrollo cambia; si se desarrollan más rápido, y tendrá menos días de ‘engorda’ por decirlo así, y se tendrán frutos más pequeños”, mencionó el doctor Vélez.
Aunado a esto, se ha reconocido que los encargados de los ámbitos de la agricultura deben de optar por nuevos mecanismos de riego, como por goteo, o por medio de tecnología como drones o alguna otra, ya que el consumo de agua es exorbitante mediante las formas tradicionales.
“No importa cuánto dinero tengas, el agua es el agua, y si se acaba, no hay cómo hacerle. Esas son consecuencias reales”.
Cambio climático también genera desplazamientos de personas
Las condiciones que propicia el cambio climático también implican que, incluso, en algunas regiones del mundo se genere un fenómeno de desplazamiento, debido a las dificultades para sobrellevar la agricultura, o bien, por impactos “extremos”.
“El término de desplazado o refugiado climático existe y se les llama así a personas que tuvieron que emigrar y desplazarse por el cambio que hizo imposible mantenerse donde residían. Por cuestiones extremas, por ejemplo”.
“El efecto es adverso, cada vez nos costará más producir comida, habrá menos agua, entonces el reto es de miedo”, consideró Aaron Vélez.
Además, se debe de ‘atacar’ el rápido acabose de los glaciares, así como el calentamiento de la atmósfera por el CO2 y metano a raíz de los gases que se propician desde el ganado, por lo que, en consecuencias, la temperatura del planeta -considerando también el océano-aumenta; “Debe de volverse de conocimiento público y que la población en general entienda que las consecuencias son reales”, finalizó el catedrático.
El cambio climático hará cada vez más complicado el producir alimentos. Foto: Archivo
Sequía en la Presa del Palote desanima a pescadores de León
El bajo nivel de la Presa del Palote ha significado una preocupación para quienes practican la pesca deportiva en el Parque Metropolitano. Aunque pescan mojarras o pez carpa, reconocen que se vuelve un tanto difícil por el nivel del cuerpo de agua, que hasta primeros de marzo era del 37 por ciento, ni siquiera de la mitad de su capacidad.
Alrededor de la presa una decena de pescadores cargan su lazo de pesca, los anzuelos y su caña. Hombres jóvenes y adultos mayores ven en la pesca un deporte consagrado que les permite relajarse y distraerse. Muchos de ellos no lo ven como negocio, sino como el momento en el que “volvemos a ser niños”. La mayoría pesca también con la intención de llevar el animal a la mesa de su casa.
Guadalupe, quien lleva 20 años yendo a pescar a la Presa del Palote, reconoce que “la presa se ve hasta más solita”. A pesar de que aun hay mojarras y carpas de hasta 15 kilos, el bajo nivel del agua ha hecho que los patos y garzas se refugien donde pueden, pues en la orilla del cuerpo de agua luce desértico y con residuos de basura.
“También lo hago por comer, en estos días de cuaresma me llevo una mojarra para comérnosla. Ellos no se acaban (los pescados) hasta que no haya de plano agua. A veces agarro 10, 15, pero hay veces que no agarro nada (en la pesca). Vengo unas tres veces por semana, vivo en San Nicolás del Palote”.
El leonés identifica la problemática de la falta de agua, pues su colonia es una de las 97 en las que Sapal terció el servicio de agua. Es decir, tiene agua un día sí y un día no. Es testigo del origen que atrae la falta de agua y en su casa también lo padece.
Los pescadores llevan comida a la mesa... cuando logran pescar algo
Alfonso, otro vecino de Valle Hermoso que lleva más de 50 años pescando, reconoce que muchos de los pescados se quedan al fondo de la Presa del Palote, seleccionados por los pescadores que comercializan las especies para restaurantes o marisquerías. Por esta razón quienes buscan atrapar a las especies en ocasiones no se llevan nada, pero lo llaman “suerte”.
Los pescados salen en condiciones óptimas para ser cocinados. Don Alfonso recuerda que hubo un tiempo en que el agua estaba contaminada, pero ahora la califica como “cristalina”.
“A veces los hago caldo, los fileteo, los empanizo. Salen normal (los pescados), mientras el agua no esté contaminada el pescado está igual. Antes sí salían contaminados porque aquí en Los Castillos había unas tenerías y toda el agua venía a caer aquí. Ya está más tratada, muy cristalina el agua”.
Quienes pescan en la Presa del Palote son hombres. Es raro ver a mujeres y niños. A los menores les restringieron en acceso a la pesca porque “sacaban peces pequeños y los dejaban muertos a la orilla de la presa”.
El pescador Alfonso, describió como una terapia ir a pescar al Parque Metropolitano.
“Es una terapia. Te relajas. Si traes un problema muy fuerte te relajas. Aquí es una terapia total. Nomás aquí sentado a ver a que hora agarras un pescadito, estás centrado en lo tuyo”.
Sequía tiene a la presa del Palote a menos de la mitad de su capacidad
La Presa del Palote mantenía un nivel del 37% de agua hasta los primeros días de marzo, de acuerdo con el Sistema Nacional de Información del Agua Monitoreo de las Principales Presas de México.
Por esta razón Sapal terció el servicio de agua en 97 colonias de la zona norte: Gran Jardín, Los Castillos, Echeveste y Valle del Campestre. Hasta que la presa recupere su nivel o llegue la temporada de lluvias se regresará, al abastecimiento común en estas zonas.
Por si fuera poco, este martes, Sapal informó que en lo que va del 2023 han detectado 45 tomas clandestinas de agua, es decir, conexiones ilegales a la red de agua potable, a través de mangueras, tuberías, conexiones y otros materiales que conducen el agua a los predios sin que pase por el medidor, para no ser controlada por Sapal.
Las multas por estas prácticas van desde los 2 mil hasta los 48 mil pesos. La paramunicipal llamó a los ciudadanos a denunciar, pues tan solo en el 2022 detectaron 894 tomas clandestinas de agua.
La Presa del Palote es una de las principales en dar abastecimiento de agua en León, los pescadores, los ciudadanos y los encargados del Parque Metropolitano esperan la temporada de lluvias para que el cuerpo de agua vuelva a llenarse.
En León cada año se extrae más agua de la permitida: especialista
Yeshúa González, ingeniero y encargado del Programa de Medio Ambiente de la Universidad Iberoamericana de León, explicó a Periódico Correo que la extracción subterránea de agua del Acuífero Valle de León sobrepasa por 51 hectómetros cúbicos el nivel delimitado del líquido.
El acuífero Valle de León se localiza en el extremo centro-occidental del estado de Guanajuato, en el límite con el estado de Jalisco.
De acuerdo con la tabla de acuíferos disponibles en Guanajuato de la CONAGUA, se tiene estimado el uso de 124.5 hm3/año (hectómetros cúbicos al año). Sin embargo, se extraen 176.3 hm3/año de forma anual. Es decir, hay un déficit de casi 52 hectómetros cúbicos de agua.
Al extraer más agua de la que se puede utilizar, de acuerdo con la Disponibilidad Media Anual de Agua en el Acuífero Valle de León, hay un riesgo de consumir agua contaminada, pues se sustrae de lo más profundo.
El maestro en Medio Ambiente detalla que la mayoría del agua que abastece a León se extrae de forma subterránea, no de la Presa del Palote. Esta abastece principalmente a la zona norte de la ciudad, pero su bajo nivel sirve como un indicador para alertar sobre el cuidado del agua.
La mayor parte del agua se va en uso agrícola
De acuerdo con el Registro Público de Derechos de Agua (REPDA), en León, el 58% de agua es concesionada para uso agrícola, mientras que el 36% para abastecimiento; el 3% para uso industrial; el 2% para diferentes usos y el 1% para servicios.
El experto en sustentabilidad ha publicado hilos en su cuenta de Twitter para alertar que en gran parte de los acuíferos del país hay poca disponibilidad de agua, no solo en el estado de Nuevo León, donde el tema se volvió tendencia tras la llegada de la planta de Tesla, donde se fabricarán autos eléctricos.
Además, faltan árboles
Al déficit de agua en el manto acuífero de Valle de León se suma la poca cantidad de árboles que hay, comparado con otras ciudades del país, y también del mundo.
De acuerdo con el Inventario del Arbolado Urbano de León, hay 760 mil 610 árboles, una densidad de 36.6 arb/ha (árboles por hectárea), que es considerada baja. La diferencia es vasta comparada con ciudades como Mérida, que tiene 2 millones 318 mil árboles. Mientras que hay otras que se quedan por debajo de León, como Playa del Carmen con 582 mil 775 árboles y Guadalajara con 585 mil 060 especies.
A nivel internacional, según el inventario, hay una diferencia abismal entre León y ciudades como Toronto, con más de 10 millones de árboles; Londres, con más de 8 millones y Madrid, con más de 5 millones de árboles.
Y para colmo, advierten por sequía
En Guanajuato, a nivel estatal, la probabilidad de sequía es media y alta, según el Monitor de Sequía en México de la Comisión Nacional del Agua (Conagua). Son seis municipios los que sufren de sequía, que se define como una anomalía climatológica en la que el agua no es suficiente para abastecer las necesidades de los humanos, animales y plantas que viven ahí.
La sequía está dividida por niveles. De los seis municipios que padecen sequía en el estado, de los que no se informan los nombres, tres tienen sequía moderada (D1) y tres sequía severa (D2).
No se ha dicho ni se podría afirmar que León se esté quedando sin agua, pero los bajos niveles de la Presa del Palote y el déficit de agua en el acuífero de Valle de León son un indicador.
*Con información de Óscar Jiménez e Ivonne Ortiz
JRP
