Tensiones en Callejón del Beso persisten por inasistencia de propietaria en diálogo con autoridades
Guanajuato, Guanajuato.- Tensiones por callejón del beso continuarán, inasistencia de Norma Gámez dificulta diálogo y acuerdos, así lo lamento alcalde Alejandro Navarro Saldaña.
El panorama del Callejón del Beso cada vez se torna más color de hormiga pues posterior a la reunión sostenida por Norma Gámez, dueña del Balcón de Ana, el secretario del Ayuntamiento, Eduardo Aboytes Arredondo y funcionarios de gobierno del estado cumplió con su palabra de plantar al llamado del alcalde por la tarde.
En entrevista Alejandro Navarro Saldaña informó que la propietaria del predio en el Callejón del Beso cometió el desaire de no asistir al canal de diálogo a comparación de todos los involucrados en las actividades económicas alrededor del sitio turístico.
“Tengo entendido que la señora no se presentó, se presentaron fotógrafos, comerciantes de la zona porque todos se ven afectados y no solamente los camarógrafos, la verdad es que cuántos contra cuántos (…) todos contra la señora Gámez desafortunadamente”, afirmó.
El pasado miércoles en reunión los fotógrafos manifestaron su inconformidad por el cierre ya que a todos les golpea en su economía y no solamente al turismo local e internacional, por lo que las continuas actitudes de estira y afloja no están permitiendo una solución definitiva, comento el Primer edil.
“Se molestaron en este sentido, ojalá que ella pueda prestarse para estos temas y finalmente a un acuerdo que no se incumpla por el beneficio de todos” preciso el presidente.
Sumado a los esfuerzos municipales se encuentra el Gobierno estatal para que esto deje de ser tema de discusión y discordia entre particulares, recalcó Navarro Saldaña.
“El gobernador está como yo les he dicho, informado del tema y quiere ver cómo nos ayuda, pero pues no hay avance (…) la señora manifestó puntualmente que quería sentarse con el secretario y no conmigo”, reveló.
Tras intentar una y otra vez en entrar al diálogo, la Sra. Norma Gámez se rehúsa a sentarse en la oficina de Presidencia y deja solo la vía tribunal desafortunadamente, puntualizo el alcalde.
“Yo te diría que no se logran poner de acuerdo, yo no quiero violentar los derechos de nadie ni que nadie se sienta intimidado y que al rato Derechos Humanos diga que yo dije”, argumentó.
Tan grave es el asunto que todos en el callejón y aledaño se sienten molestos por la actitud y postura de la dueña de la casa, pero si todo falla será el tribunal quien ordene.
“Sino pues está el tribunal y está un juicio civil, etcétera (…) a ver qué pasa”, terminó.
