Sábado, 11 Enero, 2025

11 ℃ Guanajuato

Un cacicazgo de apellido Montes…

Opinión

Eliazar Velázquez Benavídez

La diputada federal por el PAN Berenice Montes Estrada cuyo más reciente disparate en tribuna fue afirmar que López Obrador: “es el presidente más flojo de la historia”, ahora pretende ser otra vez alcaldesa del municipio de Victoria, cargo que ocupó de 2018 a 2021.

 En su “modificación de situación patrimonial y de intereses” realizada ante la contraloría interna de la LXV legislatura durante el ejercicio 2022, menciona que por su cargo público en ese momento estaba recibiendo una remuneración anual neta de 1 millón 031 pesos más otros 373 mil por otros conceptos. En cuanto a bienes materiales e inmuebles dice solo tener un vehículo marca Mitsubishi adquirido al contado en 2021 con valor de 839 mil 300 pesos, y un terreno de 506 m2, con superficie de construcción de 60 m2 comprado el 23/octubre/2020 con valor de 231 mil 791 pesos.

 

Tendrán que ser sus paisanos quienes juzguen si esos datos están apegados a la realidad. Pero también habrá que observar si en alguna declaración más actualizada de sus bienes incluye, que junto con su hermano Teodoro Montes Estrada, delegado de educación en el noreste, se consideran dueños de la presidencia municipal de Victoria y hasta de sus inmuebles. Desde 2015 se han erigido como los mandamases del lugar y a estas fechas, operando al modo de un cacicazgo,  sin ningún escrúpulo legal hasta disponen de edificios públicos para sus fines electorales, exhibiendo la noción patrimonialista que tienen del poder.

Hasta el celular les quitaban…

Y es que el pasado martes llamó la atención de los lugareños, que hacia el mediodía (en día y horario laboral) comenzaron a llegar grupos de empleados de la administración a las instalaciones de la casa de la cultura, eran de diversas áreas, incluidos hasta los policías. Al ver a los uniformados, los menos involucrados en las grillas del pueblo pensaron que los estaban convocando para afinar algún operativo con motivo del jueves y viernes santo, pues en toda la región es reconocida su  escenificación de la pasión de cristo. 

Pero no era así, en realidad ese edificio que alberga además la biblioteca municipal y una valiosa sala de piezas arqueológicas, durante esas horas estaba convertido en centro de operaciones políticas de la aspirante panista a la alcaldía. Quien no solo violentaba la ley  al promoverse en ese inmueble oficial, sino que realizaba actividades proselitistas cuando  el Instituto Estatal Electoral de Guanajuato, aun ni siquiera oficializaba la aprobación de las planillas.

 
Teodoro Montes Estrada

Perdidos todos los límites de la decencia política, se exhibían usando para propósitos partidistas ese espacio cultural oficial, pero además atropellando la dignidad y privacidad de los trabajadores, pues antes de introducirse a un salón una funcionaria  municipal les requería depositar su celular en una caja de cartón. Entraban en grupos de aproximadamente veinte personas, en el interior ya los esperaba Berenice Montes quien vestía pantalón de mezclilla y una sudadera de cuadros de colores con dibujos de Mickey Mouse. Luego de su mensaje, sus allegados tomaban la palabra y se encargaban de ejercer la presión explicita, conminándolos a alinearse: debían acudir a los mítines, poner calcomanías en sus autos, colocar banderas en las casas, etc… Terminada esa sesión de inducción al voto en favor del Partido Acción Nacional, antes de retirarse los trabajadores buscaban en la caja de cartón  el aparato que les habían retenido.

Desfiguros y adicción al poder…

En su propósito de eternizarse en el poder, la elección del 2021 arrojó datos seguramente inquietantes para los hermanos Berenice y Teodoro Montes Estrada. Aunque la primera obtuvo la diputación federal con la suma inercial de votos en los municipios más grandes del distrito 01, por el contrario, en su natal Victoria la elección de Ayuntamiento mostró para Acción Nacional una tendencia a la baja del 22% con respecto al 2018. Y ya sumada la votación total 63 de cada 100 electores de Victoria prefirieron una opción distinta, solo que la oposición se fragmentó en siete partidos.

 Al parecer buscando conjurar esos nubarrones de derrota, para esta contienda PAN y PRI van aliados en lo municipal, pero tratándose de dos frentes que en décadas recientes se han disputado con ferocidad esa alcaldía, nada garantiza que los priistas de a pie voten en masa por la abanderada del partido que llevan años combatiendo.

Lo que también merece consignarse, es como en esos poblados la adicción al poder propicia escenas extravagantes: el pasado miércoles, los pobladores miraron entre sorprendidos y divertidos que -casualmente coincidiendo con la temporada electoral- entre los romanos que recorrían las calles, ataviado como ellos, desfilaba el ex alcalde y actual delegado de la SEG  Teodoro Montes. Pero resultó un soldado en semana santa ávido de reflectores, pues no tardó en hacer circular en redes sociales esa simulación actoral que observadores locales  consideran son  teatralidades para ganar simpatías políticas. Tal afán de congratularse con el electorado hasta vistiéndose de judío con huaraches, muestran que aunque el PAN tiene estructuras fuertes, les inquieta pueda generarse un amplio voto  de castigo a ese cacicazgo familiar.

Para los hermanos Montes es fundamental la preservación del poder en Victoria, pues siendo desde hace años integrantes de ese núcleo de panistas del noreste favorecidos  con privilegios y cargos por el gobierno estatal, la eventual pérdida de su feudo los dejaría sin argumentos para seguirse vendiendo como operadores políticos eficaces.

Temas

  • Divisadero
Te recomendamos leer