Explosión de Tekchem en Salamanca cumple 22 años, ambientalistas exigen justicia
La Semarnat reconoce a Tekchem como uno de los sitios más contaminados en el país e identifican la presencia de más de 100 sustancias nocivas
Cuca Domínguez
Salamanca.- A 22 años de la explosión de químicos de la planta Tekchem, Marisa Jacott, directora de Fronteras Comunes y miembro de las organizaciones internacionales GAIA, IPEN, BFFP e integrante del frente a la protección de la salud, el medio ambiente y la igualdad, calificó de indignante la falta de justicia por una catástrofe ambiental que ha afectado a la salud de los salmantinos.
“Desde Fronteras Comunes, organización de justicia ambiental, enviamos un fraterno saludo en indignación y acción por la explosión de Tekchem suscitada el 12 de septiembre del año 2000, a compañeras y compañeros de lucha de Huamat y Dame, voluntarios y comunidades afectadas, y en especial a la maestra Maura Alicia Vázquez Figueroa por su valor, resistencia y gran trascendencia de su trabajo ambiental”, afirman en un comunicado.
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“Son ya 22 años que venimos repitiendo lo mismo, aunque cada año que pasa, lo hacemos con mayor enojo, asombro y señalamiento para las autoridades de gobierno y ambientales por la explosión de la planta de Tekchem y las consecuencias de sus actos posteriores, que como muchos desastres ambientales y emergencias químicas en México, no fueron sorpresivos, sino crónicas de muchas afectaciones anunciadas”, añadieron.
Señalan a todos los políticos involucrados
A 22 años de la catástrofe, Fronteras Comunes culpa de inacción e impunidad a los cinco presidentes de México que han estado en el cargo desde que ocurrió la explosión: Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón, Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador. También señalan a seis gobernadores de Guanajuato: Ramón Martín Huerta, Juan Carlos Romero Hicks, Juan Manuel Oliva Ramírez, Héctor López Santillana, Miguel Márquez Márquez y Diego Sinhue Rodríguez Vallejo.
Incluso apuntan a nueve titulares de la secretaría federal del Medio Ambiente y a los distintos directores de Gestión Integral de Materiales y Actividades Riesgosas (DGGIMAR-SEMARNAT), organismo directamente responsable de los trabajos de remediación de Tekchem.
Denuncian 22 años de impunidad
Precisan además que no solo alzan la voz las organizaciones ambientales y afectados. La misma Semarnat reconoce a Tekchem como uno de los sitios más contaminados en el país e identifican en el predio la presencia de más de 100 sustancias entre plaguicidas, metales, azufre, plomo, mercurio y DDT, que son de las más tóxicas y peligrosas. Estas, al respirarse, pueden provocar diversas enfermedades.
Marisa Jacott asegura que además se cumplen 22 años de remediaciones equivocadas, insuficientes y nada transparentes.
“Son 22 años de declaraciones del Gobierno federal y estatal de su supuesta colaboración para trabajar en medidas de prevención, inspección, remediación y reparación del daño para proteger a la población afectada y que pueda acceder a su derecho a un medio ambiente sano, lo que hasta ahora no ha ocurrido”, dijo.
La ambientalista dijo que luego de 22 años de injusticia ambiental, “nos da toda la justificación y certeza para señalar al Estado, gobiernos, funcionarios y legisladores, no solo como responsables sino también como promotores de la contaminación, violadores de nuestros derechos humanos, constitucionales, internacionales y de la protección ambiental”, concluyó.
Así ocurrió la explosión de Tekchem
Eran cerca de las 7:00 de la noche del 12 de septiembre del 2000. La cotidianidad de los salmantinos se vio trastocada cuando una explosión de tanque de parathion de la planta Tekchem explotó y generó una nube de químicos que recorrió varios kilómetros.
Vecinos de las colonias aledañas La Cruz y San Juan resultaron afectados. Protección Civil municipal implementó albergues en el Centro Cívico y los hospitales atendieron a personas intoxicadas.
El gerente general de la planta, Ignacio Rivero Dorancao, minimizó el hecho y dijo que “fue una fumigada gratis, en las grandes ciudades como Nueva York se paga por que se fumigue, acá es gratis”.
Sin embargo, después se supo que los químicos soltados al aire afectarían la salud de las personas que los inhalaron.
El 24 de septiembre del 2007 los trabajadores de la empresa Tekchem estallaron en huelga. Esto luego de que la empresa se negara a pagar sus prestaciones. Esto finalmente provocaría el cierre de la compañía.
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El Gobierno del estado compró el predio para garantizar el cierre seguro de la planta. A la fecha el Gobierno federal realizó una expropiación temporal para sanear el sitio el que ya está desmantelado. De cualquier modo, aún hay toneladas de residuos altamente contaminantes como los organoclorados y organofosforados.
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JRP
